Un borracho llega a la cárcel y pregunta a un guardián:
—¿Puedo hablar con ladrón que robo mi casa?
—Eso depende...¿ para qué quiere hablar con él?
—Para que me explique cómo se entra mi casa sin despertar a mi mujer.
La mujer cansada de las borracheras de su marido, un buen día no aguanta más y decide darle un buen susto para que deje de beber; se disfraza de diablo, prepara todo el ambiente y se esconde en la sala a esperar a su marido.
El borrachín llega más beodo que nunca, se deja caer sobre un sofá, y la señora sale con su traje de diablo, con un tridente luminoso en la mano y dando unos aterradores alaridos. El borracho la mira tranquilamente y sin inmutarse le dice:
- Tu a mi, no me asustas Lucifer, ¡Hace tiempo que estoy casado con tu hermana!!!!
Dos borrachos platican en un bar y uno le dice al otro:
—Oye compadre, tu sabes que yo me separé de mi mujer ¿Verdad?, pero lo que no sabes es que cada vez que yo voy a la casa, ocurre un milagro: Ella me confunde con Dios...
—Estás delirando compadre, yo no te creo eso...
—Es verdad y te lo puedo comprobar ahora mismo. Vamos a la casa para que lo veas con tus propios ojos...